POR SERGIO MORALES Y GEOVANNI CONTRERAS
A la vez, el interés por el proyecto crece en las comunidades por donde pasará, ya que es visto por líderes locales y alcaldes como una oportunidad de desarrollo.
Dickson comentó a Prensa Libre que recibió la información sobre futuros inversionistas británicos en una reunión de alto nivel, en la que participaron el canciller Fernando Carrera; el secretario de Estado británico, William Hague, y el ministro de Relaciones Exteriores para América Latina, Hugo Swire, en Londres, a finales de julio.
“Las empresas británicas van a ver las oportunidades que ofrece conectar el Pacífico con el Atlántico de esta manera, y también va muy en la línea de nuestra presidencia del G8 —Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón, Reino Unido y Rusia—, porque es una manera de utilizar el comercio global y estamos muy interesados”, dijo Dickson.
La embajadora agregó: “Tenemos, primero, fondos de inversión y empresas que tienen experiencia en infraestructura y diseño”.
Aunque no hay montos precisos, la misión comercial también definiría en qué parte de la obra invertiría, si en el ferrocarril, el oleoducto o la carretera.
El gobierno británico cuenta con un portal web donde publica proyectos internacionales que podrían interesar a empresas privadas.
Dickson indicó que en su país también hay “muchas empresas fuertes” en distribución de petróleo y gas, además de las expertas en ingeniería.
La misión comercial británica también exploraría la posibilidad de inversión en infraestructura para los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Quetzaltenango, en el 2018.
Aprueban proyecto
Alcaldes y habitantes de los municipios involucrados en el proyecto lo ven con beneplácito porque promete generar 30 mil empleos.
“En esta región, un 90 por ciento de la población está feliz porque va a ser beneficiada”, expuso René Vicente Osorio, alcalde de Santa Catarina Mita, Jutiapa, y representante de las 46 municipalidades que intervienen en el proyecto.
Víctor Hugo Paz Gómez, jefe edil de Teculután, Zacapa, expresó: “Es un proyecto único en el país. Estamos muy esperanzados de que cambiará Guatemala y la vida de mucha gente”.
Habitantes de esa región afirman que han escuchado del proyecto y coinciden en que abrirá oportunidades de desarrollo económico.
“Creo que será positivo. Cualquier proyecto que genere empleo lo veo bien”, expuso Encarnación Ortiz, vecino de Asunción Mita, y refirió que “mucha gente ya vendió sus terrenos y se los pagaron muy bien”.
Arnaldo García, habitante de El Progreso, Jutiapa, comentó que con el proyecto se generará“industria para una población que carece de empleo y donde hay mucha pobreza”.
Eduardo Vivas García, representante de la comunidad xinca en Jutiapa, expuso que ya han acordado la venta de 97 manzanas de terreno que pertenecen a esa comunidad, y el ofrecimiento es que el pago se hará este año. Vivas aseguró que quedarán como accionistas de un proyecto que traerá beneficios, por lo cual no se podrían oponer.
Inversión mundial
Guillermo Catalán, presidente de la junta directiva del Corredor Interoceánico de Guatemala, precisó que el proyecto “es importante para Asia, Norteamérica y Europa”, por lo que hay “inversionistas que vendrán por la posición geográfica del país, y otros, por el posicionamiento estratégico de sus regiones”.
Según Catalán, la inversión de US$9 mil millones —Q70 mil millones— será paulatina, y en principio un grupo de inversionistas costeará la compra de terrenos y sus trámites, y en la segunda fase se erigirá toda la infraestructura.
Los primeros inversionistas se agrupan en la empresa Eurogas Enterprises, con capitales de Dinamarca, Suecia, Noruega, Holanda, Alemania, España, Suiza y Reino Unido.
Las esperanzas de los alcaldes y vecinos las confirma Catalán: “Nuestra aspiración es que la gente ya no se vaya a EE. UU. en busca de empleo, que venga a buscar oportunidades acá. Es un proceso, pero en 15 años esta región será un Hong Kong”.
Recursos millonarios
El Corredor Interoceánico de Guatemala atraerá a inversionistas.
US$9 mil millones se invertirán en la construcción del megaproyecto.
Un millón 500 mil personas se beneficiarán directamente.
Tres mil 533 propietarios de parcelas las venderán por un promedio de US$127 mil.
El proyecto cuenta con el aval de 46 alcaldes y dos mil 300 Cocode.
Las terminales portuarias por construirse tendrán capacidad para recibir buques de hasta 22 mil teus de capacidad.
Se harán trabajos de mitigación ambiental en un área de siete mil 702 hectáreas, según prometen los promotores.
Con capital chino, se plantean proyectos similares en Honduras y Nicaragua. En México se propone también una megacarretera, y en Panamá se amplía el canal.
DERECHOS DE VÍA
Carretera será de uso libre
Guillermo Catalán, presidente de la junta directiva del corredor interoceánico de Guatemala, aseguró que la carretera que unirá a los océanos Pacífico y Atlántico podrá ser utilizada por cualquier guatemalteco, pese a que el proyecto se erigirá en un espacio privado de 372 kilómetros de largo por 140 de ancho.
“El proyecto es para la región, para Guatemala y para el mundo. El uso de la carretera como tal será libre y pública”, enfatizó el empresario, quien agregó que se respetarán los más de 300 caminos comunales por los cuales atravesará el proyecto.
Para garantizar el paso libre se construirá una cantidad similar de túneles.
“Todos se fueron identificando, son pasos comunales que cualquiera puede atravesar. No van a observar pasarelas de 140 metros, pero sí un túnel que va a pasar por debajo”, explicó el empresario.
Catalán indicó que también se respetará el paso en las extensas fincas ganaderas. “Con los propietarios que tienen extensiones grandes de tierra pactamos servidumbres privadas. Por ejemplo, si alguien tiene ganado, habrá un paso o dos, dependiendo de la extensión del área”, precisó.
El alcalde de Teculután, Zacapa, Víctor Hugo Paz, expuso que el proyecto en ningún momento dejará a alguna población sin posibilidad de comunicarse con el resto de la región.
“Ya está arreglada la interconexión entre cada municipio y sus pasos, para no dejar aislados a los pueblos, aldeas y caseríos, y si alguien viene en su carro, por ejemplo, de Huehuetenango, la vía será pública”, dijo.
Representantes del proyecto explicaron que aún no tienen el diseño final de los 300 pasos subterráneos, aunque no necesariamente será el mismo, ya que en algunos casos dependerá de la topografía.
Los empresarios aseguran que no habrá inconveniente en la construcción, incluso si en algunos pasos se cruzan con los oleoductos y los gasoductos.
En otros casos, los pasos vecinales y comunales fueron definidos por las mismas comunidades, como las propiedades de la comunidad xinca, que definió los trazos.
El proyecto cuenta con el aval de los alcaldes de los 46 municipios por donde pasará el corredor y de gran parte de los habitantes de esa región. Catalán refirió que “El corredor se sustenta en la posición geográfica del país”.
Por Sergio Morales
CARRETERA
La ruta entre océanos
372 kilómetros de largo tendrá el corredor.
300 pasos comunales se contemplaron.
Cortesía Prensa Libre, disponible en http://www.prensalibre.com/noticias/comunitario/Empresas-evaluan-invertir-canal_0_973102700.html